Andreu Genestra (Capdepera)

Ctra. Cala Mesquida, 1. Desvío Camino Son Montó
Capdepera, Mallorca
Tel. 971 565 910
www.andreugenestra.com

Un carro de gran nivel. ¡Compensa pararse!

Para muchos, el mejor restaurante de Mallorca, una visita obligada en la zona Capdepera, en un enclave rural espectacular. Una propuesta local, pausada y con una terraza en la que bien podríamos pasarnos todo el verano. Esto es Andreu Genestra.

El restaurante se encuentra en el hotel boutique Predi Son Jaumell y como digo, el edificio de entrada es maravilloso, lástima del recibimiento tan frío al entrar. Una vez sentado en esa fabulosa terraza sólo piensas en disfrutar, una buena copa de bienvenida y que empiece el menú, como siempre, el más largo (125€) y si puede ser con algún extra mejor que mejor. No tengáis miedo porque os digan que el menú largo ya es bastante potente, o incluso por avisaros de no comer pan (…) pues para nada, es completo pero muy ligero así que, a darlo todo.

Comenzamos con unos snacks con más vista que sabor, al igual que con el aceite al plato, demasiada parafernalia para acabar llevándose el pan de la mesa a mitad servicio. Durante esta secuencia, voy revisando la carta de vinos y no me sorprendo al ver una tónica cada vez más habitual. El abuso de precios en ciertos vinos en comparación con el precio de bodega. ¿Es por estar en una isla, o por qué el 90% de la clientela es extranjera? No tengo ni puta idea, pero en grandes restaurantes de Madrid y Barcelona también está pasando.

Comienza el menú en sí, y lo hace con una gran flor a base de hortalizas del mismo huerto, sobrasada y queso. Seguimos con un plato que en realidad son tres, una idea que me fascina, te llena la mesa de color, de texturas y con un objetivo claro: dar la misma importancia a las guarniciones que al ingrediente principal del plato. Y sí, muchas veces lo secundario pasa a un muy buen primer plano.

El coulant de berenjena y el conejo con anchoa son claros ejemplos de esta “trilogía” que comento. Dos platos en los que todo en conjunto funciona infinitamente mejor que si todo estuviera servido en un único plato.

El plato de la gamba está bueno, ¡faltaría! pero falta que ese marisco se integre mejor con esos tendones de ternera. Es como si en ese mar i muntanya cada uno de los protagonistas hubiera llegado a mitad del recorrido y deciden irse por senderos diferentes. Y como te digo esto, también te digo que otro plato, llamémosle “mixto” como el de molleja de pato y mejillón está muchísimo mejor conseguido. No sé si será por la naranja, pero ese cítrico hace que ni el potente sabor del ave o del molusco predomine por encima del otro. Dos sabores super potentes perfectamente conjuntados.

Espero mucho de la ventresca de atún y sobrasada con pica-pica de erizo y aunque noto ese crochet de izquierdas en la boca, echo de menos algo más de fuerza marina. Lo mismo me ocurre con el calamar y con el plato final, ternera kebab. Dos platos demasiado planos donde ni las diferentes texturas dicen absolutamente nada.

En conjunto, todo esta bien, pero ciertos platos son más estéticos que sabrosos. Además, entre ciertos platos, los tempos son algo largos, perdonable estando donde estoy sentado. Y no me gusta que la finalización de algunos pases se realice a mis espaldas y para disfrute únicamente de unos pocos comensales. Es el caso del plato de la gamba o de uno de los postres. ¿De qué sirve tener esa presse si no es para lucirla delante de cada mesa?

Y tras el menú, la crème de la crème, los quesos. Un pase que no debería ser opcional, sino más bien, el fin de fiesta, casi obligatorio sea cual fuera tu elección. Y es que aquí, en Andreu Genestra, el carro de quesos dirigido por David Serrano es simplemente espectacular y de agradecer, todo queso nacional de un altísimo nivel, muy al estilo de el emblemático El Motel de Jaume Subirós o el reciente Desde 1911. Y dicho esto, vuelvo a hacer un llamamiento para que los carros de quesos tengan más presencia en la alta (o no) gastronomía. No es sólo la categoría que das a un restaurante, sino más bien la elegancia con la que terminar un menú degustación.

“El queso es el salto de la leche hacia la inmortalidad”

Lo mejor: El carro de quesos. Sublime.
Lo mejorable: Algunos platos no sorprenden
Lo peor: No disfrutar de ciertas terminaciones

Andreu Genestra
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